martes, 15 de diciembre de 2009

Pío Pío Pío II (sin corregir ni mejorar -aún-)

(El muchacho
de la paleta
se cree un buen poeta
y solo es un borracho.)

Que siga el pío-pío en sus corrales
que yo estaré entre las flores
de mis matorrales
benévolos de olores.
Duermo mejor sin vuestros males.

Mi verdad es poesía,
y la vuestra veneno
viperino y fantasía.
Cotilléen, que soy el bueno.

No me presentaré a Presidente
de la Imaginación por ley,
mi letra, mi labia y mi diente
por Gracia del Sol me hacen rey.

Cuando me ponen verde
sigo siendo el mismo;
mi alma ya no pierde.
Los culpables caen en el abismo
de la mano del sastre del desastre:
El poema sí que muerde.

Me sonríen a la cara
(¡Y que cosa más rara!
a escondidas me apuñalan
y me escupen.)
Solo expuse a mayor escala
lo que nunca sé ni supe.

(No hace falta infrarrojos
para captar la mentira en los ojos.)

Si l@s aludid@s enfurecen
el mosquito cumplió su cometido;
por el mosquito la mosca se mosquea
y la palabra cobra vida, crece,
en mis trece escribí de lo que sea.

La confianza en las maldades es jodida.
Cada cual a su movida y nada más.
Las personas llevan luces encendidas.
Sólo hay que callarse y observar.

Bien, me conocéis borracho.
Yo también me conozco...
¿Qué me vas a contar?

Yes, tambien soy buen muchacho.
Ciego no me conozco...
¿ Qué me vais a contar?

Pero todo cambia a partir de ayer.
Será mi ser tan sólo la inmensidad.

Mi mente es la captante
de la chocante realidad.
Bien, yo paso y a mi rollo.
La última vez que arrollo
a mi personalidad.

(No tengo nada
en contra de la gente.
Solo de la malvada
lengua en las serpientes.)

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Corregido, cambiado y mejorado. Pío, Pío, Pío.

Ni oficio ni beneficio
rimas contra mí,
no estás en juicio
de nada, monada...
¿Quieres que hable de ti?

Cuando se junta
la Santísima Trinidad
a todos sacan la punta
e inventan la intimidad.

Critican, despotrican...
Que primero limpien la grasa
de su casa. Tiene guasa
el talento que no tienen,
por eso se entretienen
en grupito... ¡Qué bonito!
y con mitos intoxican.

Que revuele el mosquito
que pica.

Date la vuelta,
sal por la puerta,
se aproxima la tormenta
de las aves de corral
(Pío, pío, pío)

La mar está revuelta,
las leguas sueltas
creen que no se da cuenta
este mísero anormal
(De sus críticas me río)

Como no valgo un duro
-eso auguran las brujas
resolviendo mi futuro-
me pongo en puja:

Soy joven, inteligente;
de currante o estudiante
tengo el mundo por delante;
Que revienten las serpientes.

Así sigo, sonriente
ante las balas
de almas malas.
La mierda les cala
en los dientes.

¿Aludidas?
Que se jodan.
Solo compongo la oda
más abierta de mi vida.

Pío, pío, pío...
Hurgando en el vacío.
Pío, pío, pío...
Inventan lo que es mío.
Pío, pío, pío...
¿Confianzas? Ni me fío.
Pío, pío, pío...
Píen, que sonrío.
Pío, pío, pío...
Me piro que la lío.

jueves, 3 de diciembre de 2009

SI HAY FALTAS DE ORTOGRAFIA QUE LAS CORRIJA OTRO.

Intento llamar su atención
retorciendo su corazón.

Intentanto nadar
contra el mar y el huracán;
y anhelando volar
me tiré por el balcón:
Ahí murió Peter Pan.

Ahora soy el coco, la garduña,
mato por cebo de niño, ando loco
y me alimento de mis uñas,
me corto contra el sofoco.

Soy la mentira, el talibán;
soy la verdad del dinero,
soy de la ciudad el alquitrán
del cielo y los ceniceros.

Soy la oscuridad. El miedo
que roba la fe y el credo:
No existe otra ambiguedad
ni más allás, ni cielos:
Solo vacío durmiente, soledad
callada en un bloque de hielo.

Soy la sangre derramada
de tus brazos a tu cruz,
soy la ribera quemada,
la calidad del ataud.

Un ave se posó en su azotea
y no quiere que la vea.

Si quiere ser libre
que lo sea.
No soy nudo de mimbre
ni amante de la pelea:
Tiro la toalla. Suene el timbre.

Ahora soy la paz y el sosiego,
la alegría del sol, tierna faz
que pide fuego, con el ego
subido y sagaz.

Intento llamar su atención
improvisando una canción.

Acariciando el compás
de mi pecho y de mi voz,
de repente asomarás
dando una coz
y el pentagrama se romperá.